Receta: Carrot cake de la Hummingbird Bakery

¡Hola mis ·Beautiful and Damned·! ¡Cuánto tiempo! A lo mejor hasta os habéis olvidado de mi. Últimamente no tengo tiempo ni de respirar, y me da pena, pero tengo un poco abandonado el blog. Hoy vuelvo al ruedo por petición popular con una receta para chuparse los dedos: Carrot cake de la Hummingbird Bakery. 

Carrot Cake

Varias aclaraciones: 

La receta original dice que estas cantidades son para hacer 3 carrot cakes en molde de 20 cm de diámetro. Yo tenía un molde un poco grande de los que se desmontan y lo hice ahí, pero al hacer toda la cantidad de una sola vez tuve que doblar el tiempo de horneado y lo hice un poco a ojo. Lo saqué cuando el interior estaba todavía un poco blando, no esperé a que el pincho saliese limpio, que es lo que siempre dicen que hay que hacer.

También comentar que el frosting a mi no me quedó muy bien, estaba demasiado líquido, pero el saber era perfecto, así que lo usé de todas formas y lo coroné con coco rallado por encima que le daba un toque riquísimo, pero esto es para gustos.

¡Nos ponemos manos a la obra!

Ingredientes

300g de azúcar moreno

3 huevos

300 ml de aceite de girasol

300g de harina normal

1 cucharadita de bicarbonato sódico

1 cucharadita de levadura

1 cucharadita de canela

1/2 cucharadita de jengibre en polvo

1/2 cucharadita de sal

1/4 de cucharadita de extracto de vainilla

300g de zanahoria rallada

100g de nueces peladas y picadas (también alguna más para decorar)

Frosting de queso (al final os cuento cómo se supone que se hace)

Preparación

Pre-calentamos el horno a 170ºC.

Ponemos el azúcar, los huevos y el aceite en un recipiente y batir con las paletas o las varillas hasta que todos los ingredientes estén bien mezclados (no pasa nada si la mezcla parece que no liga del todo bien)

Añadimos a la mezcla y poco a poco la harina, el bicarbonato sódico, la levadura, la canela, el jengibre, la sal y el extracto de vainilla y seguimos batiendo hasta que esté todo bien mezclado (yo primero mezclé los ingredientes secos en un cuenco a parte y después fui añadiendo la mezcla cucharada a cucharada)

Incorporamos la zanahoria rallada y las nueces hasta que estén bien mezcladas con la masa (recomiendo rallar la zanahoria bastante fina, la mía estaba un poco basta, aunque al final no se notaba)

Repartir la masa en los moldes que previamente hemos engrasado (con un poco de mantequilla o aceite) y alisamos la superficie de la masa.

Lo metemos al horno y si hemos decidido hacer un solo carrot cake, lo dejaremos como mínimo 50 minutos e iremos comprobando su progreso, ya que dependerá en parte del horno. Si decidimos hacer los 3 que sugiere la receta inicial, con hornear 20 - 25 minutos será suficiente, aunque siempre es mejor que comprobemos con un cuchillo o pincho antes de sacarlo. El carrot cake deberá estar doradito por arriba y son sensación de que rebota al tocarlo.

Una vez nos parezca que ya está listo, lo sacaremos del horno y lo dejaremos enfriar en el molde para luego desmoldar y dejar que termine de enfriarse en una rejilla.

Cuando esté lo suficientemente frío, ponemos uno de los carrot cake en un plato o expositor, y extenderemos parte del frosting de queso por encima. Repetimos este paso con el segundo y tercero carrot cakes.

Aprovecharemos el resto del frosting para cubrir los costados y decoraremos como más nos guste (con un poco más de canela por encima, con coco rallado como hice yo, con nueces enteras...)

Este es el aspecto que Hummingbird Bakery nos sugiere para esta receta:

Carrot cake de la Hummingbird Bakery

Para el Cream Cheese Frosting, esta es la receta de la Hummingbird Bakery:

Ingredientes

300g azúcar glacé
50g mantequilla sin sal, a temperatura ambiente
1125g queso en crema (tipo Philadelphia), frío

Preparación

Mezclamos el azúcar glacé y la mantequilla con una batidora de varillas velocidad media / lenta hasta que se mezcle bien. Añadimos todo el queso en crema y lo mezclamos hasta que esté totalmente integrado. Ponemos la batidora a una velocidad media / alta y seguimos batiendo durante al menos 5 minutos, hasta que la mezcla sea ligera y airosa.

¡Y a disfrutar mis ·Beautiful and Damned·! Como de costumbre, nosotros ni siquiera pudimos esperar a que se enfriase y nos pusimos las botas. Aunque reconozco que el sabor era mejor una vez se enfrió, así que os recomiendo ser pacientes y esperar un poco para probarlo si lo hacéis.

Y con esto y un bizcocho (chiste fácil) hasta el próximo post del blog chicos.